INTRODUCCIÓN
En este trabajo se investigará el incidente que se encuentra en 1 de reyes 18:15 a 19:14, delimitado en la Biblia Hebraica Stuttgartensia por el petumah y setumah, comenzando en el enfrentamiento entre Elías y los profetas de baal en el monte Carmelo y terminando en el encuentro entre Dios, mediante el “silbo apacible”,y Elías en el monte Horeb. Muchas son las interpretaciones de este texto (1 rey 19:12), pero sin un relacionamiento directo con el primer incidente, en cuanto a un tema específico para el lector.
Los israelitas habían perdido identidad debido al sincretismo religioso (1 reyes 18:21), habían tomado desde fuera otras practicas de culto mezclando la adoración verdadera con la equivocada. Ahora Dios quiere hacerlos volver a su pacto y que su corazón se vuelva a El, para transformarlos nuevamente en su pueblo santo.
El objetivo de este trabajo es investigar como se relaciona el enfrenamiento de Elías con los profetas de baal y su posterior encuentro con Dios en ese “silbo apacible”, y probar que esta historia nos demuestra el correcto tipo de adoración a Dios. Por lo tanto, se mostraran diferentes traducciones de la comunicación y/o adoración descrito por la Biblia con respecto a Yahvé y baal, luego se hará una exégesis del encuentro entre Dios y Elías tratando de demostrar un hilo conductor en relación al primer incidente.
DESARROLLO
Presentación del texto
A continuación se presentara el texto en la versión Casiodoro de Reina versión 1960. Las palabras y frases en negrita serán analizadas en este trabajo:
18:15 Y le dijo Elías: Vive Jehová de los ejércitos, en cuya presencia estoy, que hoy me mostraré a él.
18:16 Entonces Abdías fue a encontrarse con Acab, y le dio el aviso; y Acab vino a encontrarse con Elías.
18:17 Cuando Acab vio a Elías, le dijo: ¿Eres tú el que turbas a Israel?
18:18 Y él respondió: Yo no he turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los mandamientos de Jehová, y siguiendo a los baales.
18:19 Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel.
18:20 Entonces Acab convocó a todos los hijos de Israel, y reunió a los profetas en el monte Carmelo.
18:21 Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió palabra.
18:22 Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los profetas de Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres.
18:23 Dénsenos, pues, dos bueyes, y escojan ellos uno, y córtenlo en pedazos, y pónganlo sobre leña, pero no pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro buey, y lo pondré sobre leña, y ningún fuego pondré debajo.
18:24 Invocad luego vosotros el nombre de vuestros dioses, y yo invocaré el nombre de Jehová; y el Dios que respondiere por medio de fuego, ése sea Dios. Y todo el pueblo respondió, diciendo: Bien dicho.
18:25 Entonces Elías dijo a los profetas de Baal: Escogeos un buey, y preparadlo vosotros primero, pues que sois los más; e invocad el nombre de vuestros dioses, mas no pongáis fuego debajo.
18:26 Y ellos tomaron el buey que les fue dado y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: ¡Baal, respóndenos! Pero no había voz, ni quien respondiese; entre tanto, ellos andaban saltando cerca del altar que habían hecho.
18:27 Y aconteció al mediodía, que Elías se burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios es; quizá está meditando, o tiene algún trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que despertarle.
18:28 Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos.
18:29 Pasó el mediodía, y ellos siguieron gritando frenéticamente hasta la hora de ofrecerse el sacrificio, pero no hubo ninguna voz, ni quien respondiese ni escuchase.
18:30 Entonces dijo Elías a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se le acercó; y él arregló el altar de Jehová que estaba arruinado.
18:31 Y tomando Elías doce piedras, conforme al número de las tribus de los hijos de Jacob, al cual había sido dada palabra de Jehová diciendo, Israel será tu nombre,
18:19 Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel.
18:20 Entonces Acab convocó a todos los hijos de Israel, y reunió a los profetas en el monte Carmelo.
18:21 Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió palabra.
18:22 Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los profetas de Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres.
18:23 Dénsenos, pues, dos bueyes, y escojan ellos uno, y córtenlo en pedazos, y pónganlo sobre leña, pero no pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro buey, y lo pondré sobre leña, y ningún fuego pondré debajo.
18:24 Invocad luego vosotros el nombre de vuestros dioses, y yo invocaré el nombre de Jehová; y el Dios que respondiere por medio de fuego, ése sea Dios. Y todo el pueblo respondió, diciendo: Bien dicho.
18:25 Entonces Elías dijo a los profetas de Baal: Escogeos un buey, y preparadlo vosotros primero, pues que sois los más; e invocad el nombre de vuestros dioses, mas no pongáis fuego debajo.
18:26 Y ellos tomaron el buey que les fue dado y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: ¡Baal, respóndenos! Pero no había voz, ni quien respondiese; entre tanto, ellos andaban saltando cerca del altar que habían hecho.
18:27 Y aconteció al mediodía, que Elías se burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios es; quizá está meditando, o tiene algún trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que despertarle.
18:28 Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos.
18:29 Pasó el mediodía, y ellos siguieron gritando frenéticamente hasta la hora de ofrecerse el sacrificio, pero no hubo ninguna voz, ni quien respondiese ni escuchase.
18:30 Entonces dijo Elías a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se le acercó; y él arregló el altar de Jehová que estaba arruinado.
18:31 Y tomando Elías doce piedras, conforme al número de las tribus de los hijos de Jacob, al cual había sido dada palabra de Jehová diciendo, Israel será tu nombre,
18:32 edificó con las piedras un altar en el nombre de Jehová; después hizo una zanja alrededor del altar, en que cupieran dos medidas de grano.
18:33 Preparó luego la leña, y cortó el buey en pedazos, y lo puso sobre la leña.
18:33 Preparó luego la leña, y cortó el buey en pedazos, y lo puso sobre la leña.
18:34 Y dijo: Llenad cuatro cántaros de agua, y derramadla sobre el holocausto y sobre la leña. Y dijo: Hacedlo otra vez; y otra vez lo hicieron. Dijo aún: Hacedlo la tercera vez; y lo hicieron la tercera vez,
18:35 de manera que el agua corría alrededor del altar, y también se había llenado de agua la zanja.
18:36 Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas.
18:35 de manera que el agua corría alrededor del altar, y también se había llenado de agua la zanja.
18:36 Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas.
18:37 Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres el Dios, y que tú vuelves a ti el corazón de ellos.
18:38 Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua que estaba en la zanja.
18:39 Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: ¡Jehová es el Dios, Jehová es el Dios!
18:38 Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua que estaba en la zanja.
18:39 Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: ¡Jehová es el Dios, Jehová es el Dios!
18:40 Entonces Elías les dijo: Prended a los profetas de Baal, para que no escape ninguno. Y ellos los prendieron; y los llevó Elías al arroyo de Cisón, y allí los degolló.
18:41 Entonces Elías dijo a Acab: Sube, come y bebe; porque una lluvia grande se oye.
18:42 Acab subió a comer y a beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra, puso su rostro entre las rodillas.
18:43 Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces.
18:44 A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje.
18:45 Y aconteció, estando en esto, que los cielos se oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia. Y subiendo Acab, vino a Jezreel.
18:46 Y la mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta llegar a Jezreel.
19:1 Acab dio a Jezabel la nueva de todo lo que Elías había hecho, y de cómo había matado a espada a todos los profetas.
19:2 Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero, diciendo: Así me hagan los dioses, y aun me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de ellos.
18:43 Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces.
18:44 A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje.
18:45 Y aconteció, estando en esto, que los cielos se oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia. Y subiendo Acab, vino a Jezreel.
18:46 Y la mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta llegar a Jezreel.
19:1 Acab dio a Jezabel la nueva de todo lo que Elías había hecho, y de cómo había matado a espada a todos los profetas.
19:2 Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero, diciendo: Así me hagan los dioses, y aun me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de ellos.
19:3 Viendo, pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está en Judá, y dejó allí a su criado.
19:4 Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres.
19:5 Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó, y le dijo: Levántate, come.
19:6 Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse.
19:7 Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta.
19:8 Se levantó, pues, y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios.
19:9 Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías?
19:10 El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida.
19:11 El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto.
19:12 Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado.
19:13 Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías?
19:14 El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida.
Diferentes traducciones de las frases y palabras
Investigadas del culto a baal
1 reyes 18:26
Biblia de Jerusalén: “danzaban cojeando sajándose, según su costumbre”
Dios Habla Hoy: “y daban pequeños brincos”
NVI: “daban brincos”
Nácar Colunga: “estaban ellos saltando”
1 reyes 18:28
Biblia de Jerusalén: “gritaron mas alto sajándose, según su costumbre, con cuchillos y lancetas hasta chorrear la sangre sobre ellos”
Dios Habla Hoy: “ellos seguían gritando y cortándose con cuchillos y lancetas, como tenían por costumbre, hasta quedar bañados en sangre”
NVI: “comenzaron entonces a gritar mas fuerte y, como era su costumbre, se cortaron con cuchillos y dagas hasta quedar bañados en sangre”
Nácar Colunga: “Ellos daban voces y mas voces y se sajaban con cuchillos y lancetas, según su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos”
1 reyes 18:29
Biblia de Jerusalén: “se pusieron en trance”
Dios Habla Hoy: “y aunque ellos continuaron gritando y saltando como locos”
NVI: “y siguieron con su espantosa algarabía”
Nácar Colunga: siguieron enfurecidos”
Diferentes traducciones de la
adoración / comunicación de Elías
Biblia de Jerusalén: 36 A la hora en que se presenta la ofrenda, se acercó el profeta Elías y dijo: "Yahvé, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que se sepa hoy que tú eres Dios en Israel, que yo soy tu servidor y que por orden tuya he ejecutado todas estas cosas.
37 Respóndeme, Yahvé, respóndeme, y que todo este pueblo sepa que tú, Yahvé, eres Dios que conviertes sus corazones".
Dios Habla Hoy: 36 A la hora de ofrecer el holocausto, el profeta Elías se acercó y exclamó: "¡Señor, Dios de Abraham, Isaac e Israel: haz que hoy se sepa que tú eres el Dios de Israel, y que yo soy tu siervo, y que hago todo esto porque me lo has mandado! 37 ¡Respóndeme, Señor; respóndeme, para que esta gente sepa que tú eres Dios, y que los invitas a volverse de nuevo a ti!"
NVI: 36 A la hora del sacrificio vespertino, el profeta Elías dio un paso adelante y oró así: Señor, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que todos sepan hoy que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo y he hecho todo esto en obediencia a tu palabra.37 ¡Respóndeme, Señor, respóndeme, para que esta gente reconozca que tú, señor, eres Dios, y que estás convirtiendo a ti su corazón!
Nácar Colunga: 36 Cuando llego la hora de ofrecerse el holocausto, llegose el profeta Elías y dijo: “Yavé, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel: que se sepa hoy que tu eres Dios de Israel y que yo soy tu siervo, que todo esto hago por mandato tuyo. 37 Respóndeme, Yavé; respóndeme, para que todo este pueblo conozca que tu, ¡oh Yavé!, eres Dios y que tu conviertes a ti su corazón”.
Datos relevantes sobre el texto
Al leer detenidamente, se puede notar que en diferentes partes del texto hay puntos en común que muestran un hilo conductor de un mismo tema: la tranquilidad de la comunicación/adoración entre Dios y Elías.
La adoración/comunicación entre Dios y Elías
1 reyes 18:30-39: Comunicación/adoración-Manifestación de Dios-Monte Carmelo
1 reyes 18:42-44: Comunicación/adoración-Manifestación de Dios-Monte Carmelo
1 reyes 19:4-7: Comunicación-Manifestación de Dios-Desierto
1 reyes 19:8-13:Comunicación-Manifestación de Dios-Monte Horeb
Traducciones de 1 reyes 19:12
RV 1960: 12 Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado.
13 Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto...
Biblia de Jerusalén: “el susurro de una brisa suave”
Dios Habla Hoy: “se oyó un sonido suave y delicado”
NVI: “un suave murmullo”
Nácar Colunga: “un ligero y blando susurro”
Análisis de 1 reyes 19:12
Biblia Hebraica Stuttgartensia: “דַּק דְּמָמָה קוֹל”
קוֹל: sustantivo, nominativo, masculino, singular, constructo. Voz; sonido; ruido.
דְּמָמָה: adjetivo nominativo femenino singular. Silencio; quietud; tranquilidad.
דַּק: adjetivo femenino singular. Fino; leve; escaso; tenue; menudo[1].
El Analytical Key to Old Testament de John Joseph Owens lo traduce: “a still small voice”. Las diferentes traducciones que hemos visto traducen “silbo”, “susurro”, “sonido”, “murmullo”. Ahora, la traducción del versículo podría ser la siguiente: “Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego una voz tranquila y tenue”.
Así, este ultimo versículo nos da una posición mas firme de la propuesta del autor, ya que en la ultima parte se revela el carácter de una manifestación mas personal de Dios por medio de su voz en un ambiente de tranquilidad en contraste a los elementos descritos antes de esto, Dios se manifiesta en la tranquilidad de su propia voz.
Análisis literario
La tradición judía informa que el autor de este libro fue Jeremías. Este, al parecer, actuó como un compilador de datos históricos pero con un profundo propósito religioso. La narración en forma de prosa se presenta dramáticamente, y el tema es el liderazgo espiritual de los reyes y su responsabilidad en el alejamiento espiritual del pueblo con respecto a Yahvé, a su vez, se ve la mano de Dios tratando de que no se alejen de El. Al parecer el libro fue escrito tiempo antes de la caída de Jerusalén en manos de Nabucodonor.
Contexto histórico
El reinado de Acab en Israel se extendió desde el año 874 al 853 a.C, su esposa, Jezabel, era hija de Et-baal rey-sacerdote de los sidonios quienes adoraban a baal. Jezabel trajo consigo su religión a Israel donde promovió la apostasía del pueblo. Es en esta situación donde se desarrolla el ministerio de Elías[2].
Teología
La historia demuestra el contraste entre las dos formas de adoración y/o comunicación; uno a baal y el otro a Jehová. Además nos muestra como desea Dios que sea el culto. Este debe reflejar el carácter de Dios, así como se reveló con Elías, después de todo la adoración y comunicación publica con Dios tiene un fin misionero y debe dar a conocer el carácter de Dios, reflejar a Dios, y dar conocimiento a la gente de una adoración acepta por Dios.
Dios quiere que adoremos como Elías, el era una persona semejante a nosotros (Stgo. 5:17) pero oraba y/o adoraba fervientemente y como Dios quería. Es un tipo del verdadero adorador de Jehová.
Aplicación
Elías había bajado los brazos y tenia miedo por su vida. Dios se le presenta por medio de una “voz tranquila y tenue” para recordarle que sigue estando con el así como lo demostró en el monte Carmelo. Entonces Dios estuvo con demostración de fuego, lluvia y poder en el monte Carmelo porque era necesario en ese contexto, pero quiere encontrarse con nosotros en la calma, la soledad y en un culto libre de emocionalismo.
También nos muestra lo peligroso que puede ser tomar desde afuera formas de culto diferentes a las nuestras. Hoy en día como iglesia consumimos material de otras denominaciones (libros, música, etc.) que traen consigo presuposiciones, formas de pensar, interpretaciones, etc., que son diferentes a las nuestras y que contribuyen a una falta de identidad en los miembros de iglesia, formando en sus mentes un “sincretismo” con respecto a la iglesia. Por lo tanto, la Iglesia Adventista del Séptimo día deja de ser la iglesia remanente, para pasar a ser una más en el gran mar de iglesias.
19:4 Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres.
19:5 Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó, y le dijo: Levántate, come.
19:6 Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse.
19:7 Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta.
19:8 Se levantó, pues, y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios.
19:9 Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías?
19:10 El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida.
19:11 El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto.
19:12 Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado.
19:13 Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías?
19:14 El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida.
Diferentes traducciones de las frases y palabras
Investigadas del culto a baal
1 reyes 18:26
Biblia de Jerusalén: “danzaban cojeando sajándose, según su costumbre”
Dios Habla Hoy: “y daban pequeños brincos”
NVI: “daban brincos”
Nácar Colunga: “estaban ellos saltando”
1 reyes 18:28
Biblia de Jerusalén: “gritaron mas alto sajándose, según su costumbre, con cuchillos y lancetas hasta chorrear la sangre sobre ellos”
Dios Habla Hoy: “ellos seguían gritando y cortándose con cuchillos y lancetas, como tenían por costumbre, hasta quedar bañados en sangre”
NVI: “comenzaron entonces a gritar mas fuerte y, como era su costumbre, se cortaron con cuchillos y dagas hasta quedar bañados en sangre”
Nácar Colunga: “Ellos daban voces y mas voces y se sajaban con cuchillos y lancetas, según su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos”
1 reyes 18:29
Biblia de Jerusalén: “se pusieron en trance”
Dios Habla Hoy: “y aunque ellos continuaron gritando y saltando como locos”
NVI: “y siguieron con su espantosa algarabía”
Nácar Colunga: siguieron enfurecidos”
Diferentes traducciones de la
adoración / comunicación de Elías
Biblia de Jerusalén: 36 A la hora en que se presenta la ofrenda, se acercó el profeta Elías y dijo: "Yahvé, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que se sepa hoy que tú eres Dios en Israel, que yo soy tu servidor y que por orden tuya he ejecutado todas estas cosas.
37 Respóndeme, Yahvé, respóndeme, y que todo este pueblo sepa que tú, Yahvé, eres Dios que conviertes sus corazones".
Dios Habla Hoy: 36 A la hora de ofrecer el holocausto, el profeta Elías se acercó y exclamó: "¡Señor, Dios de Abraham, Isaac e Israel: haz que hoy se sepa que tú eres el Dios de Israel, y que yo soy tu siervo, y que hago todo esto porque me lo has mandado! 37 ¡Respóndeme, Señor; respóndeme, para que esta gente sepa que tú eres Dios, y que los invitas a volverse de nuevo a ti!"
NVI: 36 A la hora del sacrificio vespertino, el profeta Elías dio un paso adelante y oró así: Señor, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que todos sepan hoy que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo y he hecho todo esto en obediencia a tu palabra.37 ¡Respóndeme, Señor, respóndeme, para que esta gente reconozca que tú, señor, eres Dios, y que estás convirtiendo a ti su corazón!
Nácar Colunga: 36 Cuando llego la hora de ofrecerse el holocausto, llegose el profeta Elías y dijo: “Yavé, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel: que se sepa hoy que tu eres Dios de Israel y que yo soy tu siervo, que todo esto hago por mandato tuyo. 37 Respóndeme, Yavé; respóndeme, para que todo este pueblo conozca que tu, ¡oh Yavé!, eres Dios y que tu conviertes a ti su corazón”.
Datos relevantes sobre el texto
Al leer detenidamente, se puede notar que en diferentes partes del texto hay puntos en común que muestran un hilo conductor de un mismo tema: la tranquilidad de la comunicación/adoración entre Dios y Elías.
La adoración/comunicación entre Dios y Elías
1 reyes 18:30-39: Comunicación/adoración-Manifestación de Dios-Monte Carmelo
1 reyes 18:42-44: Comunicación/adoración-Manifestación de Dios-Monte Carmelo
1 reyes 19:4-7: Comunicación-Manifestación de Dios-Desierto
1 reyes 19:8-13:Comunicación-Manifestación de Dios-Monte Horeb
Traducciones de 1 reyes 19:12
RV 1960: 12 Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado.
13 Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto...
Biblia de Jerusalén: “el susurro de una brisa suave”
Dios Habla Hoy: “se oyó un sonido suave y delicado”
NVI: “un suave murmullo”
Nácar Colunga: “un ligero y blando susurro”
Análisis de 1 reyes 19:12
Biblia Hebraica Stuttgartensia: “דַּק דְּמָמָה קוֹל”
קוֹל: sustantivo, nominativo, masculino, singular, constructo. Voz; sonido; ruido.
דְּמָמָה: adjetivo nominativo femenino singular. Silencio; quietud; tranquilidad.
דַּק: adjetivo femenino singular. Fino; leve; escaso; tenue; menudo[1].
El Analytical Key to Old Testament de John Joseph Owens lo traduce: “a still small voice”. Las diferentes traducciones que hemos visto traducen “silbo”, “susurro”, “sonido”, “murmullo”. Ahora, la traducción del versículo podría ser la siguiente: “Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego una voz tranquila y tenue”.
Así, este ultimo versículo nos da una posición mas firme de la propuesta del autor, ya que en la ultima parte se revela el carácter de una manifestación mas personal de Dios por medio de su voz en un ambiente de tranquilidad en contraste a los elementos descritos antes de esto, Dios se manifiesta en la tranquilidad de su propia voz.
Análisis literario
La tradición judía informa que el autor de este libro fue Jeremías. Este, al parecer, actuó como un compilador de datos históricos pero con un profundo propósito religioso. La narración en forma de prosa se presenta dramáticamente, y el tema es el liderazgo espiritual de los reyes y su responsabilidad en el alejamiento espiritual del pueblo con respecto a Yahvé, a su vez, se ve la mano de Dios tratando de que no se alejen de El. Al parecer el libro fue escrito tiempo antes de la caída de Jerusalén en manos de Nabucodonor.
Contexto histórico
El reinado de Acab en Israel se extendió desde el año 874 al 853 a.C, su esposa, Jezabel, era hija de Et-baal rey-sacerdote de los sidonios quienes adoraban a baal. Jezabel trajo consigo su religión a Israel donde promovió la apostasía del pueblo. Es en esta situación donde se desarrolla el ministerio de Elías[2].
Teología
La historia demuestra el contraste entre las dos formas de adoración y/o comunicación; uno a baal y el otro a Jehová. Además nos muestra como desea Dios que sea el culto. Este debe reflejar el carácter de Dios, así como se reveló con Elías, después de todo la adoración y comunicación publica con Dios tiene un fin misionero y debe dar a conocer el carácter de Dios, reflejar a Dios, y dar conocimiento a la gente de una adoración acepta por Dios.
Dios quiere que adoremos como Elías, el era una persona semejante a nosotros (Stgo. 5:17) pero oraba y/o adoraba fervientemente y como Dios quería. Es un tipo del verdadero adorador de Jehová.
Aplicación
Elías había bajado los brazos y tenia miedo por su vida. Dios se le presenta por medio de una “voz tranquila y tenue” para recordarle que sigue estando con el así como lo demostró en el monte Carmelo. Entonces Dios estuvo con demostración de fuego, lluvia y poder en el monte Carmelo porque era necesario en ese contexto, pero quiere encontrarse con nosotros en la calma, la soledad y en un culto libre de emocionalismo.
También nos muestra lo peligroso que puede ser tomar desde afuera formas de culto diferentes a las nuestras. Hoy en día como iglesia consumimos material de otras denominaciones (libros, música, etc.) que traen consigo presuposiciones, formas de pensar, interpretaciones, etc., que son diferentes a las nuestras y que contribuyen a una falta de identidad en los miembros de iglesia, formando en sus mentes un “sincretismo” con respecto a la iglesia. Por lo tanto, la Iglesia Adventista del Séptimo día deja de ser la iglesia remanente, para pasar a ser una más en el gran mar de iglesias.
[1] Las traducciones y análisis que se presentan aquí han sido realizadas por el autor utilizando Owens, Analytical key to the old testament, vol. 2 (Michigan: Baker Book House, 1995).
[2] Víctor Ampuero Matta, Comentario Bíblico Adventista del Séptimo Día (Florida, Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 1993), 83.